¿Te acuerdas del MSN? Recuerdos que te harán viajar en el tiempo
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Ya han pasado varios años desde que MSN dejó de existir y pasara a ser reemplazado por infinidades de otras aplicaciones, pero no nos hemos olvidado completamente de él. Todavía nos quedan recuerdos difíciles de borrar…
1. Enviar zumbidos a tus contactos para que contesten
Sin dudas, leer todos estos puntos habrá despertado en ti un montón de anécdotas y la más pura nostalgia. Pero lo que más extrañamos de MSN es su particular “zumbido”, que hacía vibrar la ventana de conversación, mientras que un sonido marcaba el llamado de atención.
Un zumbido… Dos, tres… ¡Cualquier cantidad era aceptable, hasta que esa persona contestara tu mensaje!
2. Ver quiénes están conectados y poder hablarles, mientras el resto te ve “no conectado”
Una gran demostración de tus habilidades ninja era iniciar sesión como “no conectado”, para de esa manera ver qué contactos había disponibles, y si valía la pena hacer tu entrada triunfal.
Muchas veces, aparecer como “no conectado” era la forma de vida de muchos. Que únicamente se ponían “disponibles” para cierta persona especial.
3. Usar frases de canciones como estado, para enviar indirectas
Pensar tu estado (también conocido como “sub-nick" era todo un arte, sobre todo porque necesitábamos esa frase de una canción, que dijese las palabras justas para la persona indicada.
Probablemente, esa persona no se diera por aludida… Pero nosotros íbamos revisando contactos, aprendiendo de su vida según lo que allí escribían, y pensando si alguno de esos mensajes no sería para nosotros…
4. Llamar la atención de tus amigos pasando de “conectado” a “no conectado” constantemente
Ser el primero que iniciaba una conversación era visto como una señal de desesperación… Irónicamente, la solución a ese problema era conectarse y desconectarse continuamente, generando spam con ventanas a tus contactos, que indefectiblemente notarían tu presencia, iniciando una conversación
5. Todas las imágenes podían ser emoticones
Además de los ya conocidos (y que han trascendido épocas), MSN nos daba la posibilidad de crear nuestros propios “emoticones”, a partir de cualquier imagen. Obviamente, eso resultaba o bien en un motivo de admiración para tus contactos (que luego los “robarían”, al poder guardar los emoticones usados por los demás), o un caos que haría imposible leer una línea completa de texto.
6. Jugar online con tus contactos mientras conversas
Si ya no tenías nada que hablar con esa otra persona, pero no querías dar por terminado el contacto, siempre estaba la opción de compartir un juego.
Las opciones no eran muchas y el tiempo de conexión al servidor era realmente tedioso… Pero bueno, a veces valía la pena y se volvían a generar espontáneas charlas. Porque claro, absolutamente nadie jugaba por diversión.
7. Poder mostrar a tus contactos lo que estás escuchando
Otra variante al mensaje de estado era que mediante el reproductor Windows Media Player, nuestros contactos vieran qué música estábamos escuchando en ese preciso momento, para de esa forma dar una buena impresión o generar empatía en nuestros contactos.
Además, era una sencilla forma de caerle bien a alguien, luego de la famosa frase “¡Wow! ¡Me encanta esa canción!”. Nunca fallaba.
8. Personalizar estados con MSN PLUS
°·.¸.·°¯°·.¸.·°¯°·.¸.-> escribir así tu nombre era la moda, ¿recuerdas? <-.¸.·
9. Dibujar o escribir a mano alzada
Una de las herramientas más utilizadas (no de la forma en que fue pensada) fue la de escribir a mano alzada, que permitía enviar palabras o dibujos como si estuviéramos trabajando en MS Paint.
Tal vez allí surgieron los memes, como respuestas rápidas que aspiraban al humor a través de imágenes… Pero el rango de usos que tenía esta herramienta era enorme. Incluso dando lugar a juegos como Pictionary.
10. Echar la culpa a un supuesto amigo, cuando alguna frase te hizo quedar mal
Luego de hacer esa pregunta tan incómoda, pero de la cual dependía nuestra vida, tal vez la respuesta no sea la esperada. Pero tranquilos, siempre había una forma de salir del paso: “Jajajaja. Perdón, eso fue mi amig@ haciéndome una broma… Yo nunca diría eso”.
Un plan perfecto, que siempre nos haría salir bien parados, ¿no?